Suplantación de identidad
La suplantación de identidad es un problema al que cada vez más gente se enfrenta. El crecimiento de internet, las redes sociales y, en general, el auge de la era digital, ha provocado que los hackers o agentes con intenciones maliciosas tengan cada vez más puertas abiertas para usurpar la identidad de otros.
¿Qué es la suplantación de identidad?
La suplantación de identidad es una actividad malintencionada que consiste en hacerse pasar por otra persona por diversos motivos: cometer algún tipo de fraude, obtener datos de manera ilegal, cometer ciberbullying o grooming (conseguir la confianza de un menor para poder abusar sexualmente de él). El ejemplo más típico de suplantación es crear un perfil falso en las redes sociales para poder comunicarse con otras personas haciéndose pasar por ella.
Por lo general se suele tender a pensar que las únicas personas a las que se suplanta su identidad son personas famosas, como por ejemplo políticos o celebrities. Esta es una idea incorrecta, ya que cualquier identidad de un usuario anónimo corre el riesgo de ser suplantada. El número de personas que han denunciado una suplantación de identidad ha crecido exponencialmente en los últimos años.
Son varias las consecuencias de la suplantación de identidad, desde «simples» molestias, hasta serios problemas legales. Y es que esta, especialmente la suplantación de identidad digital, se ha convertido en uno de los principales problemas relacionados con la seguridad a los que se enfrentan algunos usuarios de servicios de correo, como pueden ser Gmail u Outlook, o en las redes sociales como Twitter y Facebook.